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Gastroenteritis/colitis por CMV

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Es una inflamación del estómago o del intestino debido a una infección por citomegalovirus (CMV).

Las afecciones conexas abarcan:

  • Infección pulmonar
  • Infección en la parte anterior del ojo
  • Infección de un bebé mientras está en gestación

El citomegalovirus (CMV) es un virus del tipo herpes. Se relaciona con el virus que causa la varicela.

La infección por CMV es muy común. Se propaga por medio de la saliva, la orina, las gotitas respiratorias, el contacto sexual y las transfusiones sanguíneas. La mayoría de las personas están expuestas en algún momento, pero la mayoría de las veces, el virus produce síntomas leves o no produce ningún síntoma en personas saludables.

Se pueden presentar infecciones serias por CMV en personas con sistemas inmunitarios debilitados debido a:

  • SIDA
  • Tratamiento de quimioterapia para el cáncer
  • Durante o después de un trasplante de médula o de órganos
  • Colitis ulcerativa o enfermedad de Crohn

En casos raros, se ha presentado infección por CMV grave que compromete el tubo digestivo en personas con un sistema inmunitario sano.

La enfermedad gastrointestinal por CMV puede afectar un área o todo el cuerpo. Se pueden presentar úlceras en el esófago, el estómago, el intestino delgado, o el colon. Dichas úlceras están asociadas con síntomas como:

  • Dolor abdominal
  • Dificultad para deglutir o dolor con la deglución
  • Náuseas
  • Vómitos

Cuando afecta los intestinos, las úlceras pueden causar:

  • Dolor abdominal
  • Heces con sangre
  • Diarrea
  • Fiebre
  • Pérdida de peso

Las infecciones más serias pueden ocasionar sangrado gastrointestinal o un agujero a través de la pared del intestino.

Los exámenes que se pueden llevar a cabo abarcan:

  • Enema opaco
  • Colonoscopía
  • Endoscopía gástrica duodenal (EGD)
  • Coprocultivo para descartar otras causas de infección
  • Tránsito esofagogastroduodenal

Los exámenes de laboratorio se realizan en una muestra de tejido tomado del estómago o del intestino. Los exámenes, como una biopsia o un cultivo de tejido gástrico o intestinal, determinan si el virus está en el tejido.

Un examen de serología para CMV se lleva a cabo con el fin de buscar anticuerpos contra este virus en la sangre.

También se puede realizar otro examen sanguíneo que busca la presencia y número de partículas del virus en la sangre.

El objetivo del tratamiento es controlar la infección y aliviar los síntomas.

Se recetan medicamentos para combatir los virus (medicamentos antivirales). Dichos medicamentos se pueden administrar por vía intravenosa y algunas veces por vía oral durante algunas semanas. Los medicamentos que se utilizan más comúnmente son ganciclovir y valganciclovir.

En algunos casos, puede ser necesaria la terapia prolongada. Se puede emplear un medicamento llamado globulina hiperinmunitaria para CMV cuando otros fármacos no funcionan.

Otros medicamentos pueden incluir:

  • Fármacos para prevenir o reducir la diarrea
  • Calmantes para el dolor (analgésicos)

Asimismo, se pueden emplear suplementos nutricionales o alimentación intravenosa para tratar la pérdida muscular a causa de la enfermedad.

En personas con un sistema inmunitario sano, los síntomas desaparecen sin tratamiento en la mayoría de los casos.

En aquellas personas que tienen sistemas inmunitarios debilitados, los síntomas son más graves. El desenlace clínico depende de la gravedad de la inmunodeficiencia y de la infección por CMV.

Las personas con SIDA pueden tener un desenlace clínico peor que aquellas con sistemas inmunitarios debilitados debido a otra razón.

La infección por CMV afecta de manera particular a todo el cuerpo, incluso si los pacientes sólo tienen síntomas gastrointestinales. La evolución del paciente depende de qué tan bien funcionen los fármacos antivirales.

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