La infección por clamidia en los hombres es una infección de la uretra. La uretra es el conducto que drena la orina desde la vejiga. Pasa a través del pene. Este tipo de infección se transmite de una persona a otra durante el contacto sexual.
La infección por clamidia es causada por la bacteria Chlamydia trachomatis. Tanto hombres como mujeres pueden tener clamidia sin tener ningún síntoma. En consecuencia, usted puede infectarse o transmitirle la infección a su pareja sin saberlo.
Usted es más propenso a resultar infectado con clamidia si:
;Algunos síntomas comunes son:
La clamidia y la gonorrea a menudo se presentan juntas. Los síntomas de la infección por clamidia pueden ser similares a los de la gonorrea, pero continúan incluso después de que el tratamiento por gonorrea ha finalizado.
Si usted tiene síntomas de una infección por clamidia, su proveedor de atención médica puede sugerir una prueba de laboratorio llamada PCR. Su proveedor tomara una muestra de secreción del pene. Esta secreción es enviada a un laboratorio para que la analicen. Los resultados estarán listos de 1 a 2 días.
Su proveedor también puede examinarlo en busca de otros tipos de infecciones, como la gonorrea.
Generalmente no se realizan pruebas a los hombres que no tienen síntomas de una infección por clamidia.
La clamidia se puede tratar con una variedad de antibióticos. Los efectos secundarios comunes de estos antibioticos son:
Usted y su pareja deben recibir tratamiento con el fin de evitar el contagio recíproco. Incluso los compañeros sexuales que no presenten síntomas necesitan recibir tratamiento. Usted y su pareja deben terminar todos los antibióticos, aunque se sientan mejor.
Debido a que la gonorrea frecuentemente ocurre junto con la clamidia, tratamiento para la gonorrea se ofrece frecuentemente al mismo tiempo.
El tratamiento con antibióticos casi siempre es eficaz. Si sus síntomas no mejoran rápidamente, verifique que también esté recibiendo tratamiento para la gonorrea y otras infecciones propagadas a través de contacto sexual.
Las infecciones graves o las infecciones que no se traten rápidamente en raras ocasiones pueden causar cicatrización de la uretra. Este problema puede dificultar el paso de la orina y puede requerir cirugía.