Un juanete se forma cuando el dedo gordo del pie apunta hacia el segundo dedo. Esto causa la aparición de una protuberancia en el borde externo del dedo.
Los juanetes son más comunes en las mujeres que en los hombres. El problema puede ser hereditario. Las personas que nacen con huesos anormales en los pies son más propensas a formar un juanete.
El uso de zapatos de punta estrecha y tacón alto puede llevar a la formación de un juanete.
La afección puede volverse dolorosa a medida que la protuberancia empeora. En la base del dedo gordo crece hueso extra y un saco lleno de líquido.
Los síntomas pueden incluir:
Usted puede tener problemas para encontrar zapatos que calcen bien o que no causen dolor.
Generalmente, un proveedor de atención médica puede diagnosticar un juanete con sólo mirarlo. Una radiografía del pie puede mostrar un ángulo anormal entre el dedo gordo del pie y el pie. En algunos casos, también se puede observar artritis.
Cuando un juanete apenas comienza a desarrollarse, cuide bien sus pies:
Si el juanete empeora y duele más, la cirugía puede ayudar. La cirugía bunionectomía realinea el dedo y remueve la protuberancia ósea. Hay más de 100 procedimientos quirúrgicos diferentes para tratar esta afección.
Se puede evitar que un juanete empeore cuidándolo. Trate de usar zapatos diferentes apenas empieza a formarse.
Los adolescentes pueden tener más dificultades para tratar un juanete que los adultos. Éste puede ser el resultado de un problema óseo subyacente.
La cirugía reduce el dolor en muchas, aunque no en todas las personas con juanetes. Después de la operación, las personas a menudo tienen problemas para usar zapatos elegantes o estrechos.
Regresar