Logo de netsaluti

guía de condiciones de la A-Z


M

Mutismo selectivo

Regresar

El mutismo selectivo es una afección por la cual un niño puede hablar, pero deja de hacerlo súbitamente. Ocurre a menudo en la escuela o en contextos sociales.

El mutismo selectivo es más común en niños menores de 5 años. Su causa o causas se desconocen. La mayoría de los expertos cree que los niños con esta afección heredan una tendencia a ser ansiosos e inhibidos. La mayoría de los niños con esta afección tienen cierta forma de miedo (fobia) extrema.

Los padres con frecuencia piensan que el niño ha optado por no hablar. Sin embargo, en la mayoría de los casos, el niño en realidad es incapaz de hablar en ciertos contextos.

Algunos niños afectados tienen una historia familiar de mutismo selectivo, timidez extrema o trastornos de ansiedad, lo cual puede aumentar el riesgo de sufrir problemas similares. 

Este síndrome no es lo mismo que mutismo, en el cual los niños nunca hablan. En el caso del mutismo selectivo, el niño tiene la capacidad tanto de entender como de hablar, pero es incapaz de hablar en ciertos contextos o ambientes.

Los síntomas incluyen:

  • Capacidad para hablar en el hogar con la familia
  • Miedo o ansiedad entorno a personas que no conocen bien
  • Incapacidad para hablar en ciertas situaciones sociales
  • Timidez

Este patrón se debe observar durante al menos 1 mes para considerarse mutismo selectivo (el primer mes en la escuela no cuenta, ya que es común que se presente timidez durante este período).

No existe un examen para el mutismo selectivo. El diagnóstico se basa en la historia de los síntomas de la persona.

Los profesores y consejeros deben tener en cuenta las cuestiones culturales, como haberse mudado recientemente a un nuevo país y hablar otra lengua. Es posible que los niños que no se sienten cómodos con una nueva lengua no deseen usarla por fuera del entorno familiar. Esto no es mutismo selectivo.

También deben tenerse en cuenta los antecedentes de mutismo de la persona. Las personas que han experimentado un trauma pueden mostrar algunos de los mismos síntomas vistos en el mutismo selectivo.

El tratamiento del mutismo selectivo involucra cambios de comportamiento. La familia y la escuela del niño deberían participar. Algunos medicamentos para tratar la ansiedad y la fobia social se han empleado de manera segura y eficaz.

Usted puede encontrar información y recursos en grupos de apoyo para el mutismo selectivo.

Los niños con este síndrome pueden tener desenlaces clínicos diferentes. Es posible que algunos necesiten continuar con la terapia para la timidez y la ansiedad social en sus años de adolescencia y posiblemente hasta la adultez.

El mutismo selectivo puede afectar la capacidad del niño para desempeñarse en un escenario social o educativo. Sin tratamiento, los síntomas pueden empeorar.

Regresar