El trastorno de síntomas somáticos (TSS) se presenta cuando una persona siente una ansiedad extrema a causa de síntomas físicos como el dolor o la fatiga. La persona tiene pensamientos, sensaciones y comportamientos intensos relacionados con los síntomas que interfieren con su vida diaria.
Una persona con TSS no finge sus síntomas. El dolor y los demás problemas son reales. Pueden ser provocados por un padecimiento de salud. A menudo, no se puede encontrar una causa física. Sin embargo, el problema principal es la reacción extrema y los comportamientos relacionados con los síntomas.
El TSS generalmente comienza antes de los 30 años. Se presenta más frecuentemente en las mujeres que en los hombres. No está claro por qué algunas personas presentan esta afección. Ciertos factores pueden estar involucrados:
Las personas que tienen antecedentes de maltrato físico o abuso sexual pueden ser más propensas a padecer este trastorno. Pero no todas las personas con TSS tienen una historia de maltrato.
El TSS es similar al trastorno de ansiedad por enfermedad. Este sucede cuando una persona es excesivamente temerosa de enfermarse o presentar un padecimiento grave. La persona está plenamente convencida de que en algún punto se enfermará seriamente. Pero a diferencia del TSS, hay poco síntomas reales o no los hay del todo.
Los síntomas físicos que se pueden presentar con el TSS pueden incluir:
Los síntomas pueden ir de ligeros a severos. Puede ser uno o más síntomas. Estos pueden ser intermitentes o cambiar. Los síntomas pueden deberse a una afección. También es posible que no tengan ninguna causa clara.
El síntoma principal del TSS es la manera en la que una persona se siente y se comporta en respuesta a estas sensaciones físicas. Estas reacciones deben persistir por 6 meses o más. Una persona con este trastorno puede:
Le realizarán un examen físico completo. Su proveedor de atención médica puede hacer ciertos exámenes para encontrar causas físicas. Los tipos de exámenes que se hacen dependen de los síntomas que tenga.
Su proveedor puede referirlo con un proveedor de atención psicológica. Este profesional puede llevar a cabo más pruebas.
El objetivo del tratamiento es controlar sus síntomas y ayudarle a funcionar en la vida.
Tener una relación de apoyo con su proveedor de atención médica es vital para su tratamiento.
También es posible que visite a un profesional en salud mental (terapeuta). Es importante que consulte a alguien que tenga experiencia en el tratamiento de este trastorno. La terapia conductual cognitiva (TCC) es un tipo de psicoterapia que puede ayudar a tratar este trastorno. Trabajar con un terapeuta puede ayudarle a aliviar el dolor y otros síntomas. Durante la terapia, usted aprenderá a:
Su terapeuta también tratará la depresión u otras enfermedades de salud mental que pueda tener. Es posible que tome antidepresivos para ayudar a aliviar la ansiedad y la depresión.
A usted no le deben decir que los síntomas son imaginarios o que todo está en su cabeza. Su proveedor debe colaborar con usted para manejar los síntomas tanto físicos como emocionales.
De no recibir tratamiento, usted puede tener:
El TSS es una enfermedad prolongada (crónica). Colaborar con sus proveedores y seguir su plan de tratamiento es importante para controlar este trastorno.
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