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Tularemia

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Es una infección bacteriana común en roedores salvajes. La bacteria se transmite a los humanos por contacto con tejidos de animales infectados. La bacteria también se puede transmitir por medio de garrapatas, picadura de moscas y mosquitos.

La tularemia es causada por la bacteria Francisella tularensis.

Los seres humanos pueden contraer la enfermedad a través de:

  • La picadura de una garrapata, un tábano o mosquito
  • La inhalación de material vegetal o tierra infectada
  • El contacto directo, a través de una herida en la piel, con un animal infectado o su cadáver (con mayor frecuencia un conejo, una rata almizclera, un castor o una ardilla)
  • La ingestión de carne infectada (poco frecuente)

El trastorno se presenta con mayor frecuencia en América del Norte y algunas partes de Europa y de Asia. En los Estados Unidos, esta enfermedad se encuentra con mayor frecuencia en Missouri, Dakota del Sur, Oklahoma y Arkansas. Aunque se pueden presentar brotes en los Estados Unidos, son escasos.

Algunas personas pueden presentar una neumonía después de inhalar el material vegetal o tierra infectada. Se sabe que esto ocurre en la isla Martha's Vineyard (Massachussetts), donde las bacterias están presentes en conejos, mapaches y mofetas.

Los síntomas aparecen de 3 a 5 días después de la exposición. La enfermedad generalmente comienza de manera repentina. Puede continuar durante varias semanas después del inicio de los síntomas.

Los síntomas pueden incluir: 

  • Fiebre, escalofríos, sudoración
  • Irritación de los ojos (conjuntivitis, si la infección comienza en el ojo)
  • Dolor de cabeza
  • Rigidez articular, dolores musculares
  • Mancha roja en la piel que crece hasta formar una llaga (úlcera)
  • Dificultad respiratoria
  • Pérdida de peso

Los exámenes para detectar esta afección incluyen:

  • Hemocultivo para detectar la bacteria
  • Examen de sangre que mide la respuesta inmunitaria del cuerpo (anticuerpos) a la infección (serología para tularemia)
  • Radiografía de tórax
  • Prueba de reacción en cadena de la polimerasa (RCP) de una muestra de una úlcera

El objetivo del tratamiento es curar la infección con antibióticos.

Los antibióticos estreptomicina y tetraciclina se utilizan comúnmente para tratar esta infección. Otro antibiótico, la gentamicina, se ha usado como una alternativa a la estreptomicina. La gentamicina parece ser muy efectiva, pero solo se ha estudiado en una cantidad pequeña de personas dado que esta es una enfermedad poco frecuente. Los antibióticos tetraciclina y cloramfenicol se pueden usar solos, pero usualmente no son la primera opción. 

La tularemia es mortal en alrededor del 5% de los casos no tratados y en menos del 1% de los casos que reciben tratamiento.

La tularemia puede provocar estas complicaciones:

  • Infección ósea (osteomielitis)
  • Infección del saco alrededor del corazón (pericarditis)
  • Infección de las membranas que cubren el cerebro y la médula espinal (meningitis)
  • Neumonía
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