Es un tipo de cáncer que se ha diseminado desde otro órgano hasta la delgada membrana (pleura) que rodea los pulmones.
La sangre y el sistema linfático pueden transportar células cancerosas a otros órganos del cuerpo. Ahí, pueden producir nuevas neoplasias o tumores.
Casi cualquier tipo de cáncer se puede propagar a los pulmones e involucrar a la pleura.
Los síntomas pueden abarcar cualquiera de los siguientes:
El proveedor de atención médica lo examinará y le preguntará sobre su historia médica y los síntomas. Los exámenes que se pueden hacer incluyen:
Los tumores pleurales usualmente no se pueden extirpar con cirugía. El cáncer original (primario) debe tratarse. La quimioterapia y la radioterapiapueden utilizarse, dependiendo del tipo de cáncer primario..
Su proveedor puede recomendar una toracentesis si usted tiene mucha acumulación de fluido alrededor de los pulmones y tiene dificultad para respirar o niveles bajos de oxígeno en la sangre. Luego que el fluido es removido, se permite que el pulmón se expanda más. Esto que facilita la respiración.
Para evitar que el fluido se acumule de nuevo, se puede poner un medicamento directamente en el espacio torácico a través de un tubo, llamada catéter. O el cirujano puede rociar un medicamento o talco sobre la superficie pulmonar durante el procedimiento. Esto ayuda a sellar el espacio alrededor de los pulmones para prevenir que el fluido reaparezca.
La tasa de supervivencia a cinco años (número de personas que viven más de cinco años después del diagnóstico) es menos del 25% para las personas con tumores pleurales que se han diseminado desde otras partes del cuerpo.
Los problemas de salud que pueden resultar incluyen: