La vasculitis por hipersensibilidad es una reacción extrema a un fármaco, infección o sustancia extraña. Lleva a que se presente inflamación y daño a los vasos sanguíneos, principalmente en la piel. El término no se usa comúnmente porque otros nombres más específicos se consideran más precisos.
La vasculitis por hipersensibilidad o vasculitis cutánea de los vasos pequeños es causada por:
Generalmente afecta a personas mayores de 16 años.
A menudo, la causa del problema no se puede encontrar ni siquiera estudiando cuidadosamente el historial clínico.
La vasculitis por hipersensibilidad puede lucir como la vasculitis necrosante sistémica, la cual puede afectar los vasos sanguíneos en todo el cuerpo y no solo en la piel. En niños, puede lucir como púrpura de Henoch-Schölein
Los síntomas pueden incluir:
El proveedor de atención médica basará el diagnóstico en los síntomas. El proveedor verificará qué medicamentos ha tomado así como las infecciones recientes que ha tenido. Le hará preguntas sobre tos, fiebre o dolor de pecho.
Le realizarán un examen físico completo
Es posible que le realicen pruebas de orina y sangre para buscar trastornos sistémicos como el lupus eritematoso sistémico, la dermatomiositis o hepatitis C. Las pruebas de sangre pueden incluir:
La biopsia de piel muestra inflamación de los vasos sanguíneos pequeños.
El objetivo del tratamiento es reducir la inflamación.
Su proveedor puede prescribir ácido acetilsalicílico (aspirin), antiinflamatorios no esteroides (AINE) o corticosteroides para reducir la inflamación de los vasos sanguíneos. (NO les dé ácido acetilsalicílico a los niños, a no ser que sea indicado por el proveedor).
Su proveedor puede solicitarle que deje de tomar las medicinas que podrían estar causando esta afección.
La vasculitis por hipersensibilidad en la mayoría de los casos desaparece con el tiempo. La afección puede reaparecer en algunas personas.
Es necesario revisar a las personas con vasculitis continua en busca de vasculitis sistémica.
Las complicaciones pueden incluir: