Las enfermedades del viajero son más comunes en las vacaciones de verano cuando nos desplazamos con más frecuencia al extranjero. Los oftalmólogos advierten que varias de estas enfermedades pueden afectar también a los ojos y dañar nuestra salud visual.
Científicos estadounidenses encontraron que algunas personas daltónicas carecen de hasta un tercio de las células especializadas en detectar la luz. Sin embargo, aparte de problemas para distinguir los colores, la calidad general de la visión de estas personas no parece tener problemas. Los investigadores de la Universidad de Rochester, en Estados Unidos, esperan que su trabajo les permita detectar más rápida y tempranamente dificultades en la visión.
Los científicos han concluido el primer diseño completo de un implante que podría tomar el lugar de células sensibles a la luz en la retina de un ojo dañado. Los actuales implantes usan chips que convierten la luz en impulsos eléctricos que van al cerebro a través del nervio óptico. El nuevo artefacto trabajará de manera distinta. Será colocado en una retina dañada y convertirá la luz en químicos que estimularán las células nerviosas
Aunque suene cómico, un parche ocular o unas gafas para el sol podrían leer la temperatura corporal y avisar sobre deshidratación. La nueva invención, desarrollada por un investigador de la Universidad de Yale, está destinada a hacer exactamente eso, dando a los atletas una lectura constante de la temperatura corporal para evitar la insolación y la falta de líquido.
El descubrimiento permitiría tratar enfermedades degenerativas de la vista. Científicos escoceses anunciaron el descubrimiento de un gen cuya mutación origina una rara enfermedad que hace que algunos niños nazcan sin ojos. El mal, conocido como anoftalmia bilateral, afecta a uno de cada 100.000 nacimientos, y aparece en los primeros 28 días de gestación cuando se interrumpe el desarrollo normal de los ojos en el feto
Medir el nivel de azúcar en la sangre de un diabético podría ser algo tan sencillo como mirarse al espejo, si los investigadores de la Universidad de Pittsburgh tienen éxito en su tarea de diseñar un innovador lente de contacto destinado a verificar el nivel de glucosa del usuario. Los científicos quieren hacer un lente dotado de un sensor químico en un reborde, que pueda ser usado por cualquier diabético, incluso por aquellos que no requieren corrección alguna de su visión.