La pandemia causada por el nuevo coronavirus SARS-CoV-2 ha afectado a más de 4 millones de personas y se le han atribuido más de 250.000 fallecimientos de forma global. Hasta el momento los hospitales del mundo han dado prioridad a la atención de enfermos con COVID-19, la enfermedad causada por este virus.
Las autopsias de COVID-19 revelan daño alveolar difuso, y trombosis vasculares de pequeño calibre, a la vez que sugieren que el embolismo pulmonar podría causar la muerte. Se suspende el veto a estas necropsias en salas BSL-3 o similares por seguridad. La Sociedad Española de Anatomía Patológica argumenta su actuación desde el inicio de la crisis para sofocar la polémica falta de autopsias.
Se ha emitido una alerta desde el interior de NHS England sobre el aumento, en las últimas tres semanas, de casos de nuevos síntomas en pacientes pediátricos que necesitan ingreso en la unidad de cuidados intensivos y que pueden estar vinculados con el coronavirus.
Embarazadas con COVID-19 suelen ser asintomáticas, y casi nueve de cada 10 solo tendrán enfermedad leve, de acuerdo con un nuevo estudio de 43 casos tratados en dos hospitales de Nueva York, Estados Unidos.
Se han identificado cinco casos más de síndrome de Guillain-Barré asociados con COVID-19, lo que respalda una vez más un vínculo entre el virus y complicaciones neurológicas, incluido el síndrome de Guillain-Barré.
La pandemia de COVID-19 empuja al Grupo GEICAM de Investigación en Cáncer de Mama a publicar una completa guía que ayude a los profesionales sanitarios a adaptar el manejo de sus pacientes durante la pandemia. Ofrece pautas generales y específicas en cuanto a cirugías, administración de radioterapia y quimioterapia.