Su consumo, pero sólo en las comidas, podría reducir los niveles de glucosa y evitar la diabetes tipo 2.
Obesidad y diabetes se ha demostrado que su relación se asocia principalmente a una dieta desequilibrada acompañada de sedentarismo. De hecho, la relación entre ambas es tan estrecha que se ha acuñado el término "diabesidad".
Obesidad y diabetes se ha demostrado que su relación se asocia principalmente a una dieta desequilibrada acompañada de sedentarismo. De hecho, la relación entre ambas es tan estrecha que se ha acuñado el término "diabesidad".
Obesidad y diabetes se ha demostrado que su relación se asocia principalmente a una dieta desequilibrada acompañada de sedentarismo. De hecho, la relación entre ambas es tan estrecha que se ha acuñado el término "diabesidad".
Obesidad y diabetes se ha demostrado que su relación se asocia principalmente a una dieta desequilibrada acompañada de sedentarismo. De hecho, la relación entre ambas es tan estrecha que se ha acuñado el término "diabesidad".
Según un nuevo estudio, el consumo de alcohol, incluso en niveles que la mayoría consideraría moderados (unas cuantas cervezas o copas de vino a la semana), también puede conllevar riesgos para el cerebro.