La relación entre la alimentación y la calidad del sueño es fundamental para mantener un descanso reparador y revitalizante. La elección de los alimentos que consumimos antes de ir a la cama puede tener un impacto significativo en la facilidad para conciliar el sueño y en la calidad de nuestro descanso nocturno.
Se trata de sustituir los ácidos grasos saturados, presentes en muchas dietas, por los insaturados presentes en este alimento.
La remolacha es en realidad el tallo bajo de una planta propia de la Europa mediterránea y occidental. También se denomina betarraga o betabel.
Los consumidores son cada vez más exigentes con la alimentación y, por tanto, con su hidratación.
La piña es saciante, una gran aliada en la digestión, rica en vitaminas y minerales, y con pocas calorías.